Lilian Judith (1950) |
Forever in my heart
My soul is weary with sorrow; strengthen me according to your word. (Ps 119:28)
On September 23, 1950 on a blessed day, God kissed our world and delivered us a precious baby girl, the first child of Tito and Tita. Her name is Lilian Judith Gonzalez Gonzalez, my beautiful mother. She grew with lots of love and wonderful parents, my grandparents.
Now it has been 8 days after my mother went to heaven, and her love and presence are still within my broken heart. I can feel her comforts, and her happy smile she always share with all of us. She died last Saturday, October 2, 2010. Exactly four months after my son was born.
Beto |
You came with me to the boy scouts for 17 years. Cheer me up when I played the piano. I've seen my old piano still in your home, which you have kept well. You took me to all the swimming lessons until I became part of the competition team.
Graduation (1996) |
When I got married and migrated back to my birth country, you kept pouring out your unconditional love to us. In my darkest moments, and when I thought my life was over, you were there. Your love rescued me. When my first wife left me, you came to give me hope, comforts, prayers, words of encouragement and company. And more important, you reinforced the need to forgive her; holding nothing back. While you were here with me; Tito died, and you decided to stay with me, and we mourned together the loss of my grandfather, your dad. Now you have reunited with him. With God's help I've become a selfless and kind person, serving hundreds of young people. You gave me a very inspiring model to follow in my life. As years passed, God's wisdom grew deeper in my soul. You kept sending me inspirational messages about His love. Sometimes it was too much, I thought. Some of them I shared, in the Bible study group I lead. Now I miss getting them from you.
Christmas (2001) |
I remember how happy you were when I told you about Jessica, and on you came to celebrate our wedding. Her family loves you so much. They always have told me, how amazed they were about you, and they write lots of praises about you. Many of them have written me notes of condolences. You touched their souls too.
They day we told you about the triplets, you joyfully cried with us out of happiness. And you lifted up praises of celebration to God. Everywhere you went, people heard the good news in our family, they heard about your first three grandchildren. Then when I called you about our triplet's loss, you held your mourning inside, to be able to give us comforts, to assure us that God has not abandoned us or forsake us. That we should not give up on a miracle from Him. When you came to visit us, I realized how much you missed them too; because on mother's day when we went to visit their grave, you quietly placed your rose on their grave. And you prayed for them silently. I saw that, and my babies felt your love from above. We knew that we counted with you for the adoption process, that you would travel with my beloved wife, and give her company.
Jace Birth (2010) |
Abuelita feeding Jace |
Now, you are holding my three babies up in Heaven. I know without any doubt that the love that you and my children are experiencing is beyond anything I could ever imagine. I know that God is wiping every tear off your face, in a place where there is no more death, mourning, crying or pain.
I love you, I miss you,
Your son,
Beto
(Psalm 34:18)
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Versión en Español
Adiós Mami
"De tristeza llora mi alma;
fortaléceme conforme a tu palabra."
(Salmo 119:28)
El 23 de septiembre de 1950 en un día glorioso, Dios besó nuestro mundo y nos entregó una nena preciosa, el primer bebe de Tito y Tita. Su nombre es Lilian Judith González González, mi madre hermosa. Creció con mucho amor y padres maravillosos, mis abuelos.
Ahora ha pasado 8 días después de que mi mami se fue al cielo, y su amor y presencia están todavía dentro de mi corazón quebrado. Puedo sentir sus consuelos, y la sonrisa feliz que ella siempre compartía con todos nosotros. Se murió el sábado pasado, el 2 de octubre de 2010. Exactamente cuatro meses después de que mi primer hijo nació.
Querida mami, yo nunca podre verte lindamente envejecer o ver tu cara con arrugas de sabiduría, o poder pasar una Navidad todos juntos con Jace. En pocos días yo celebraré mi primer cumpleaños sin ti, sin oír su voz cantándome "feliz cumpleaños". Pero en ese día yo voy estar muy atento al cielo para poder oírte desde aquí abajo en este mundo.
Ahora puedes ver mejor todas mis imperfecciones, pero también puedes ver cuánto te amo, y cuánto te extraño.
Tú me llevaste en tu vientre por nueve meses; tu amor me cuidó, me alimentó y protegió de mí cuando era más indefenso. Pasaste largas noches cuidándome. Me abrazaste, cambiaste mis pañales, me enseñaste cómo hablar, y suavemente me cantabas canciones de bebé en mis oídos. Me llevaste a la escuelita en mi primer día; te sentabas conmigo para ayudarme con mis tareas, e incluso hiciste algunas de mis tareas por mí, mientras yo me quedaba dormido.
Viniste conmigo a los scouts durante 17 años. Estabas muy feliz cuando tocaba el órgano. De hecho mi viejo órgano todavía está en tu hogar, tú los has cuidado bien. Me llevaste a todas las clases de natación hasta que llegara a ser parte del equipo de competencia.
Beto |
Cuando me casé y emigré de regreso a mi país de nacimiento, mantuviste tu amor incondicional a nosotros. En mis momentos más oscuros, y cuando pensé que mi vida se había acabado, estuviste allí. Tu amor me rescató. Cuando mi primera esposa me dejó, viniste a darme esperanza, alivio, oraciones, palabras de ánimo y compañía. Y más importante reforzaste la necesidad de perdonarla, sin mantener ningún remordimiento. Mientras estuviste aquí conmigo, Tito se murió, y decidiste permanecer conmigo, y lloramos juntos la pérdida de mi abuelo, tu papi. Ahora ustedes se han reunido. Con la ayuda de Dios, he llegado a ser una persona generosa y amable, sirviendo a cientos de jóvenes; tú me diste un modelo muy inspirador a seguir en mi vida. Al pasar de los años, la sabiduría de Dios creció profunda en mi alma. Seguías envirándome mensajes inspiradores acerca del amor de Dios. A veces fue demasiado, yo pensé. Algunos de esos mensajes los compartí, en el grupo de estudio de Biblia que dirijo. Ahora extraño recibir tus mensajitos.
Fuiste un gran Ingeniero Civil. En mi viaje de regreso al aeropuerto, pasando por edificios, puentes y túneles en que tú trabajaste, me dio otra demostración asombrosa de trabajo dedicado tuyo. Miles de personas los atraviesan cada día, y ellos no saben quién los hizo. En tu humildad, nunca esperaste reconocimiento. Pero ahora quiero por siempre reconocer y celebrar tus trabajos y los logros. Estoy siguiendo tus pasos, yo trabajo y produzco los mejores carros que yo pueda diseñar, estoy agradecido de trabajar, y poder bendecir muchas otras generaciones y poder salvar vidas con los sistemas en que yo trabajo.
Recuerdo cuán feliz fue cuando te conté acerca de Jessica, y en viniste a celebrar nuestra boda. La familia de mi esposa, te adora mucho. Ellos siempre me han dicho, cuan asombrados están acerca de ti, y ellos escriben muchos elogios acerca de ti. Muchos de ellos también me han escrito notas de pésame. Tú tocaste sus almas también.
El día que nosotros te anunciamos acerca de la venida de los trillizos, lloraste alegremente con nosotros. Y distes elogios de celebración a Dios. Por todas partes que fuiste, las personas oyeron las buenas noticias de nuestra familia, ellos se enteraron de tus tres nietos. Cuando te llamé acerca de la pérdida de nuestro bebes, escondiste tu luto adentro; para poder darnos aliento, para asegurarnos que Dios no nos ha olvidado o abandonado. Nos dijiste que nosotros no podemos darnos por vencido de que milagros son posibles. Cuando viniste a visitarnos, me di cuenta de cuánto también tu los extrañabas; porque en el día de madre cuando fuimos a visitar su tumba, colocaste calladamente tu rosa en su tumba. Y oraste por ellos en silencio. Vi eso y mis bebés sintieron su amor desde el paraíso. Siempre supimos que contábamos contigo para el proceso de adopción, que viajaría con mi amada esposa, y daría su compañía, para conocer tus nuevos nietos.
Mami y Jace |
Llevabas el álbum de fotografías de Jace por todas partes en Venezuela. Por primera vez estabas felizmente "chocha" con tu primer nieto. Mientras te preparabas para la cirugía, o antes de algún momento temeroso, mi amada hermanita te mostraba la foto tuya con él, y sonreías otra vez. Oro que Dios me dé la fuerza y sabiduría a enseñar a mi hijo, e instruirlo como tú lo hiciste. Espero que te honore y te bendiga en todo lo que hago, en mi trabajo, en mi casa, en mi comunidad, y con quienquiera yo me pueda encontrar todos los días de mi vida.
Ahora, tú tienes a mis tres bebés allá arriba en el Cielo. Sé sin duda alguna que el amor que tu y mis niños sienten es más allá de cualquier cosa yo jamás podré imaginarme. Sé que Dios secará todas y cada una de vuestras lágrimas, en un lugar donde no hay más muerte, ni luto, ni mas lamento, ni llorar o dolor.
Te amo, te extraño
Tu hijo,
Beto
"Cercano está el SEÑOR a los quebrantados de corazón,
y salva a los abatidos de espíritu."
(Salmo 34:18)
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Love Personified
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